La primera opción es el roaming internacional, esta es la forma más sencilla porque solo contactas con tu compañía de telefonía, pero probablemente sea muy costoso, dependiendo del tiempo que estarás fuera de tu país.
La segunda es conectarse a las redes de Wifi público, es una opción muy barata, pero es insegura y te hace dependiente de estar buscando lugares que te puedan ofrecer la clave del internet.
La tercera opción es comprar una SIM de cualquier compañía local. Actualmente, en la mayoría de aeropuertos en el mundo puedes encontrar la venta de estos chips. Es una manera sencilla y hasta te puede permitir realizar llamadas, pero la desventaja es que tu celular tiene que estar desbloqueado para cualquier empresa de telefonía y es limitado solo a un país, excepto en los países que conforman el Espacio Schengen.
Por último, tienes los módems Wifi, que los puedes comprar o alquilar. Son dispositivos que te permiten conectarte a internet en cualquier país, pero puede ser caro y tienes que cargar un dispositivo adicional siempre, que es el terminal que te brindará el internet.
Como puedes observar, tener internet en tus viajes es imposible, tienes diferentes opciones y tu elección solo dependerá del presupuesto y las necesidades que requieras.